Para Cicerón el esplendor, la fuerza, la abundancia, son patrimonio de los áticos, y de no ser así no podrían llamarse áticos ni a Demóstenes ni a Esquines.
Belisario Roldán puede ser calificado con propiedad un orador ático porque la expresión de su pensamiento estuvo siempre envuelta por la belleza de la forma. Todo rebuscamiento estuvo ausente en sus oraciones.
Sus frases surgían unas tras otras sin dar la impresión de esfuerzo alguno. La armonía, la elasticidad, la sobria sonoridad de la combinación y contraposición de palabras o ideas, la medida en los párrafos, transmitiendo a sus escuchas los acentos musicales de su voz lo perfilaron como un artista completo en ese género.
Belisario Roldán perteneció a una generación que sentía admiración por la inteligencia empleada por quienes lucharon por la organización política y unión nacional y por la generación del 80 – que creían en la necesidad de insertar el país en la corriente de progreso económico mundial y, en la de generar un Estado moderno y vigoroso, dotado de los instrumentos necesarios para operar en la transformación de la sociedad.-
Nació en Buenos Aires el 16 de septiembre de 1873, donde realizó estudios primarios, secundarios y terciarios hasta doctorarse en Derecho en 1895.
No ejercería su profesión de abogado por dedicarse al periodismo y la literatura, volcando su fuerza dramática y su belleza poética en el discurso.
Su fama, es sabido, desbordó las fronteras de la patria, cuando en el Ateneo de Madrid, al pronunciar una de sus famosas oraciones, la prensa española, registró un verbo brillante que venía desde el otro lado de los mares.
Reconocida su oratoria en 1910 fue comisionado para participar en la inauguración del monumento en honor a nuestro Libertador en Boulogne Sur Mer.
También enriqueció su producción literaria, con más de treinta obras teatrales , la escena nacional en momentos que había pasado el fervor inicial por los temas gauchescos, los autores como Belisario Roldán ampliaban el espectro de su temática con el género dramático más próximo a la realidad de entonces.
Entre ellas mencionamos:“El rosal de las ruinas”; “El puñal de los troveros”, “Los contagios”, “El burlador de mujeres”; “Hacia las cumbres” “Cuando muere el día” entre muchas otras.
También ocupó una banca de diputado nacional desde 1902 a 1906, habiéndose consagrado como expositor de temas candentes como “Accidentes de Trabajo”; “Justicia de paz”; “Ley de divorcio”; “El escrutinio uninominal “; “Sobre el juramento de un diputado”, “Sobre una interpelación”; “Sobre ley de amnistía”; “Ley de residencia”; “Sobre pensiones y jubilaciones”entre otras magistrales exposiciones.
Adquirió la librería “la Facultad” en 1907 y fue bibliógrafo excepcional, y bajo la dirección de Ricardo Rojas publicó la Biblioteca Argentina: Compendio de autores nacionales, con prólogos y anotaciones; dando luz 16 volúmenes de obras selectas de Alberdi recopiladas por Joaquín V. González y la segunda edición de la “Historia Argentina” de Vicente Fidel López.
En agosto de 1922, el 17 de agosto para ser más precisos, su vida se apagó en Alta Gracia, víctima de una enfermedad incurable.
Mariano de Vedia y Mitre asienta:”La elocuencia brilló sobre todo en sus oraciones laudatorias, en las que pudo poner sus condiciones sobresalientes de colorista y lograr efectos insuperables, provocando la emoción de sus oyentes al evocar hombres, escenas y lugares con maestría singular.”
Bibliografía:
Silva Hernán:”Belisario Roldán; el pico de oro.”. Publicación mensual de interés general. N°17. Buenos Aires, 15 de agosto de 1947.
“Centenario del nacimiento de Belisario Roldán”. Empresa Central de Correos y Telecomunicaciones. Correo Central. Emisión de filatelia 29 de junio de 1974.
Roldán Belisario. Pasaje. Topografía:
Corre de E. a O. desde 4500 hasra 4599, a la altura de Servando Bayo 1500. Carece de designación oficial.
Recuerda al poeta, dramaturgo y orador excepcional, Belisario Roldán (1873 – 1922) considerado uno de los más brillantes de su época.
EL LUGAR DESDE EL CUAL BELISARIO ROLDÁN IMPROVISÓ SU CÉLEBRE “ORACIÓN A LA BANDERA”
Muy pocos rosarinos conocen que en la antigua residencia de bulevar Rondeau al 800, cuyo balcón sobresalía hacia la calle como desafiante proa, tuvo lugar un episodio relevante en la historia de la lengua castellana, cuando el célebre poeta y autor teatral, Belisario Roldán, el 9 de noviembre de 1914, pronunció su famosa ”Oración a la Bandera:”
Cuenta Plácido Grela:“ miles de personas presenciaron allí la jura de la Bandera y luego peticionaron con fuertes exclamaciones su deseo de escuchar a Roldán (que procedente de Buenos Aires para los actos conmemorativos del centenario de la creación del Regimiento 11 “General Las Heras” había hablado en la mañana durante largos minutos en los actos del Parque Independencia, ante unas diez mil personas).
Cuando un solemne silencio se adueñó del lugar Roldán fijando su vista en la Celeste y blanca, pronunció su benemérita “Oración a la Bandera”.
Con el correr de los años el predio fue utilizado con distintos fines. En la actualidad poco queda de la antigua construcción, que fue completamente reciclada para que funcionen allí locales comerciales, entre los números 835 y 869.