Expresa el historiador Felipe Peña: “Los triunfos alcanzados por los sufragistas en Europa y Estados Unidos , junto con la mayor democratización del sistema electoral en la Argentina y la llegada al gobierno del radicalismo, dieron nuevo impulso a las argentinas que venían bregando por el reconocimiento de sus derechos como ciudadanas.”
Desde joven se dirigió a los poderes públicos solicitando que se la declarase ciudadano de la República Argentina (sus derechos de ciudadanía).
El 16 de julio se le otorgó tal derecho, pero incluyéndola en el empadronamiento militar.
Nacida en Briga Marittima, Italia, 22 de marzo de 1873 a los 13 años, con sus padres radicados en Argentina, Julieta ingresó al Colegio Nacional de La Plata que la habilitaba para ingresar a la universidad.
En 1891 optó por estudiar para médica, una profesión vedada a las mujeres pero pudo acceder por un permiso especial del Dr. Leopoldo Montes de Oca.
Se convirtió en la quinta médica recibida en Argentina y, junto con la primera egresada en esa casa de estudios la Dra. Cecilia Grierson, fundó la Asociación Universitaria Argentina.
En 1906, Lanteri asistió al Congreso Internacional del Libre Pensamiento que se hizo en Buenos Aires y contó con la presencia de otras feministas como Raquel Camaña, Elvira Rawson de Dellepiane, Petrona Eyle, Sara Justo, Cecilia Griersony Adelia Di Carlo. El Congreso la expuso a ideas ligadas a obtener la igualdad de sexos, la igualdad política y el divorcio.
En mayo de 1910 organizó, junto a otras mujeres, el Congreso Femenino Internacional que tuvo como sede a Buenos Aires. Se presentaron trabajos de mujeres de todo el mundo referidas a temáticas de género como derechos civiles y políticos, divorcio, educación, cultura, economía, etc.
Fue el primer evento de este tipo que mostró al mundo, de manera concreta, la organización feminista y las propuestas para modificar las situaciones de inferioridad que vivían las mujeres.
En 1911 la Municipalidad de Buenos Aires convocó a los vecinos para que actualizaran sus datos en los padrones, en vistas a las elecciones municipales de concejales.
Llamó a que lo hicieran “los ciudadanos mayores, residentes en la ciudad, que tuvieran un comercio o industria o ejercieran una profesión liberal y pagasen impuestos”.
También se creó la Liga para los derechos de la mujer y del niño y el Centro Feminista fundado por E.R. Delliepiane, a la cual se sumó Lanteri promoviendo una importante discusión en pro de la divulgación de los derechos políticos de la mujer.
Ella advirtió que nada se decía sobre el sexo y prosiguió solicitando su inscripción en la justicia.
El juez resolvió a favor de ella y expresó: “Como juez tengo el deber de declarar que su derecho a la ciudadanía está consagrado por la Constitución y, en consecuencia, que la mujer goza en principio de los mismos derechos políticos que las leyes, que reglamentan su ejercicio, acuerdan a los ciudadanos varones, con las únicas restricciones que, expresamente, determinen dichas leyes, porque ningún habitante está privado de lo que ellas no prohíben”.
El 26 de noviembre, votó en el atrio de la Parroquia San Juan Evangelista de La Boca.
Al día siguiente, la novedad apareció en los diarios: La profesional del Hospital Ramos Mejía fue la primera mujer que votó, en 1911 en la Argentina.
El historiador y político Adolfo Saldías se desempeñaba como presidente de mesa y cuándo Lanteri votó la saludó y se congratuló “por ser el firmante del documento del primer sufragio de una mujer en el país y en Sudamérica”.
La Dra. Lanteri se dirigió a La Nación y a La Prensa, por entonces los medios más leídos y contó el hecho.
En 1919 se postuló para ocupar una banca en la Cámara de Diputados de la Nación y alegó ante la Junta electoral: “la Constitución Nacional emplea la designación genérica de ciudadano sin excluir a las personas de mi sexo, no exigiendo nada más que condiciones de residencia, edad y honorabilidad, dentro de las cuales me encuentro, concordando con ello la ley electoral, que no cita a la mujer en ninguna de sus excepciones”.
La Junta accedió a su reclamo y Lanteri compitió por una banca en el Congreso como diputada, convirtiéndose así en la primera mujer candidata en la Argentina.
En la Cámara de Diputados expresó “No se olviden de tener vivo en la retina, mi figura parada sobre los bancos de Buenos Aires, con mi clásico vestido blanco y gritando a los cuatro vientos mi anhelo de una banca en este Congreso”.
Pese a ser discriminada por los varones de su época, que insistentemente trataron de amedrentar su carrera política y científica, fundó el Partido Feminista Nacional y la Asociación Universitaria Argentina.
A principios de 1920, el Senador Dr. Juan B. Justo la incluyó en su lista del Partido Socialista Argentino junto a Alicia Moreau de Justo.
En 1924, año en que triunfó el Dr. Alfredo Palacios, Julieta lo siguió en cantidad de votos obtenidos. No fue poca cosa, y a partir de allí comenzó a ganarse aún más enemigos.
Vivió en Buenos Aires, La Plata, Olivos y Quilmes, lugares donde cultivó la amistad con Alfonsina Storni, Alfredo Palacios, José Ingenieros, entre muchas personalidades.
Julieta Magdalena Ángela Lanteri pudo lograr ocupar en quinto lugar, la posición de médica en nuestro país.
El 23 de febrero de 1932, la Dra. Lanteri caminaba por la Diagonal Norte, en pleno microcentro de Buenos Aires, cuando un automovilista la golpeó y huyó.
Después de dos días, el 25 de febrero, murió a los 58 años en el hospital.
Ese asesinato, “accidente de un vehículo marcha atrás” terminó con su lucha, pero no con su memoria. Sucedió en años de abolición de derechos sociales y políticos, durante la presidencia “de facto” del general golpista José Félix Uriburu.
Bibliografía:
La expuesta en el texto.
Julieta Lanteri, Pionera del sufragio femenino en Argentina-
Araceli Bellota: Julieta Lanteri. La pasión de una mujer, Editorial Planeta.
Ana María de: Paloma blanca. Biografía de Julieta Lanteri.
Lanteri. Pasaje. Topografía:
Pasaje denominado provisoriamente como N°1750 del barrio Santa Lucía, continuación de Cerrito 7400.
Se le impuso ese nombre por O.10083 de 30 septiembre 2020.
Recuerda a la quinta médica argentina, fundadora del Partido Feminista Nacional y la Asociación Universitaria Argentina.