Antes de la divulgación del reloj se tenía en cuenta para dividir las horas del día, el canto del gallo que gritaba tres veces en la noche: a la media noche, a las 3 de la madrugada y al amanecer o aurora.
Costumbre adoptado por los romanos que pasó a la península ibérica durante su ocupación y de allí al Río de la Plata.
En la división de la noche, los romanos establecieron “la tarde” o la primera vigilia que comprendía el tiempo que media desde la puesta del Sol hasta la hora 21; la noche o segunda vigilia desde la hora 21 a media noche, “canto de gallo” o tercera vigilia entre la media noche y las tres de la mañana y “maitines” o cuarta vigilia desde las tres de la mañana a la salida del sol.
Se daba por corriente que los callos cantaban por primera vez apenas pasada la medianoche, haciéndolo en forma unánime al amanecer a la aurora.
Durante el período colonial, en nuestras regiones el primer canto del gallo representaba un momento fijo y determinado de la noche.
Entre el paisanaje era norma “ensillar” al primer canto del gallo “y los conductores de carretas que efectuaban el tráfico de carga entre los centros urbanos y puestos solía llevar colgada del pértigo de sus vehículos una jaula con un gallo que les servía de despertador. Ave que le señalaba en forma precisa el instante de uncir los bueyes a media noche o al amanecer. Llamaba a este último momento “a la oración”.
Han pasado dos siglos y el hombre de las grandes urbes de hoy ha cambiado sus costumbres y ha olvidado un tanto el amanecer, con sus cantos, sonidos e imágenes.
Cree que sólo es un cambio de postura cuando cada aurora, amanecer, alba o como lo llamemos, es la suerte de despertar nuestras neuronas y el estallido de nuestros sentidos, todo un desafío que merece ser vivido.
El aria “Alta en el cielo”, perteneciente a la ópera Aurora del compositor y director argentino Héctor Panizza, es utilizada en Argentina como himno de tributo a la bandera.
“AURORA” ES UNA DE LAS CANCIONES A LA BANDERA MÁS CANTADAS, A PESAR DE NO HABER SIDO ESCRITA CON ESA INTENCIÓN.
Las vicisitudes de la dulce Aurora, simbolizan el nacimiento de la Nación Argentina.
Una ópera Italiana se volvió en “Saludo a la Bandera”.
La ópera "Aurora" fue compuesta en Milán por el músico Héctor Panizza por encargo del Gobierno Argentino en el año 1906.
Inspirada en un trágico hecho de la historia local, narrado en un relato de Héctor Cipriano Quesada y Luigi Illica, fue compuesta por el autor en su departamento de Milán y lleva el nombre de la protagonista femenina, quien simboliza el nacimiento de la Nación Argentina.
La ópera está fuertemente influenciada por la cultura italiana, por cuanto Panizza (hijo de italianos) concurrió al Real Conservatorio de Milán (que hoy lleva el nombre de Giuseppe Verdi), y además porque Illica, uno de los autores del texto, fue un reconocido libretista de Giacomo Puccini.
La parte instrumental fue completada en Londres, pero, en ocasión del debut, los cantantes fueron italianos:
Cesare Assanti, Amedeo Bassi, Giuseppe La Puma y Titta Ruffo, quienes llegaron a la Argentina desde Génova.
“Aurora” fue representada por primera vez el 5 de septiembre de 1908 en el Teatro Colón de Buenos Aires, inaugurado ese mismo año.
En aquel histórico momento, mientras se alzaba el telón, en un profundo clima emotivo, los presentes escucharon la voz del tenor Amedeo Bassi, quien moduló el aria en italiano:
Alta pel cielo, un’aquila guerriera,
ardita s’erge in volo trionfale.
Ha un’ala azzurra, del color del mare,
ha un’ala azzurra, del color del cielo.
Così nell’alta aurora irradiale,
il rostro d’or punta di freccia appare,
porpora il teso collo e forma stelo,
l’ali son drappo e l’aquila è bandiera.
È la bandiera del Paese mio,
nata dal sole; e ce l’ha data Iddio!
En idioma español:
Alta en el cielo un águila guerrera,
audaz se eleva en vuelo triunfal.
Azul un ala, del color del cielo,
azul un ala, del color del mar.
Así en el alta aurora irradial,
punta de flecha el áureo rostro imita,
y forma estela al purpurado cuello.
El ala es paño, el águila es bandera.
Es la bandera de la Patria mía,
del sol nacida, que me ha dado Dios.
Es la bandera de la Patria mía,
del sol nacida, que me ha dado Dios;
es la bandera de la Patria mía,
del sol nacida, que me ha dado Dios.
El éxito de las representaciones de “Aurora” no reconoce épocas. Desde 1999, el tenor argentino Darío Volontè ofreció su voz para interpretarla.
Bibliografía:
Información suministrada por Wladimir Mikielievich.
.Aurora. Calle. Topografía:
Corre de E. a O. desde el 2900 al 3600 desde Ovidio Lagos a Cosntitución a la altura del 5200.
Se le impuso ese nombre por Decr. 3725 del año 1945.
Se supone que el Concejo Deliberante ha querido homenajear el nacimiento de cada aparición solar.