La nota titular del diario “La Convención de Rosario” en la edición del 6 de noviembre de 1856, fue a raíz que una nueva epidemia mortal de cólera asolaba a la población de nuestra ciudad.
Dos fueron las epidemias:
1867-68
1886-87
En nuestra ciudad, en 1867 se produjo la primera epidemia cuando regresaban los soldados por vía fluvial de La guerra con el Paraguay o La guerra de la Triple Alianza, conflicto militar en el cual la Triple Alianza estuvo conformada por una coalición por el Imperio del Brasil, Uruguay y Argentina.
La enfermedad fue traída por un buque brasileño portando desde Goya, Entre Ríos, tropas que habían combatido contra el Paraguay.
Esta enfermedad transmisible fue una sumatoria del hecho que Rosario fuera paso y concentración de tropas que se enviaban al frente a combatir y además puerto de desembarque de heridos que provenían de los enfrentamientos.
Al regresar los soldados rosarinos del frente, la población debió soportar una epidemia de viruela, peto en marzo de 1867, el Tribunal de Medicina informaba al jefe político Saturnino Ibarlucea haberse comprobado catorce casos fatales de cólera, los que fueron en constante aumento.
Los primeros afectados aparecieron en las rancherías ubicadas en los alrededores de la Laguna de Sánchez, actualmente “Plaza Sarmiento”, que era también un foco de infección.
Temible epidemia que los médicos Tomás Hutchinson, Mauricio Hertz, Francisco Riva y Juan Bautista Arnaldi, combatieron con prisa y sin descanso.
Cabe destacar que en el lapso de tiempo comprendido entre que el pequeño pueblo del Rosario elevado a la categoría de Villa Ilustre y Fiel (1823), hasta convertirse en ciudad (03/08/1852), comenzaron a llegar a esta región numerosos profesionales con una profunda vocación, en busca nuevos horizontes.
El historiador Francisco Cignoli, en el artículo “Médicos del pasado rosarino” del diario La Capital en su edición del 24 de noviembre de 1968, cuenta que:
“El doctor Juan Bautista Arnaldi, médico italiano, fue otro de los galenos que se radicaron en Rosario, promediando el siglo XIX, donde ejerció su emblemática profesión durante tres décadas (1856-1887).
Hijo de Domingo Arnaldi, había nacido en Finale en el año 1809 y falleció en nuestra ciudad el 8 de enero de 1887.
De los estudios cursados por Arnaldi en Italia sus descendientes en ésta conservaron certificado en latín de la “Regia Genuensis Universitas Studiorum”, del “Regium Genuense Athenaeum” y otros dos del “Regium Genunse Archi Gymnsium”.
Laureado en Medicina el 5 de diciembre de 1845, el certificado de libre práctica redactado en italiano, le fue expedido el 14 de agosto de 1847 en lengua española”.
Enterado Arnaldi en Italia, que Rosario era un centro productor de cereales y que se presentaba en Europa como enorme puerto abierto a las actividades del mundo, decidió establecerse en esta tierra de promisión, sumando el hecho que Rosario había conquistado el honroso título de “segunda ciudad de la República”.
El diario “La Confederación” del 17 de julio de 1856, presentaba al profesional, detallando origen, identidad y agregando después “recién llegado a esta ciudad, ofrece sus servicios profesionales, gratis a los pobres.
E estableció en calle Aduana (hoy Maipú) casa de alto del Sr. Maza Nº. 65 y contrajo enlace con doña Carmen Moreyra, argentina.
Así continuó su profesión hasta su muerte requerido como por gente de escasos recursos que siempre encontraba en él un verdadero auxilio en situaciones terminales.
Bibliografía:
Cignoli, F:“ Rosario, sus primeros médicos” Diario La Tribuna Suplemento del 13 y 21 de agosto de 1952.
Cignoli, F “Médicos que actuaron en Rosario desde 1854 a 1868” Diario La Tribuna del 13 de enero de 1957.
Arnaldi. Pasaje. Topografía:
Corre de E. a O. desde el 1500 al 1599 entre Bv. Seguí y calle 24 de Setiembre, desde la calle Corrientes hasta Presidente Roca.
Se le impuso ese nombre en recuerdo del Dr. J. B. Arnaldi, médico italiano de benemérita actuación en Rosario, desde 1856 hasta su muerte en 1887.